Mantequilla avellana
¿Mantequilla avellana? ¿Qué es eso? La mantequilla avellana o beurre noisette se utiliza en muchas preparaciones, como la tarta de zanahoria. Es el resultado de calentar y clarificar la mantequilla, quedando un olor de lo más rico, y un sabor… mmmmm… que le da un toque muy muy bueno a los bizcochos por ejemplo. También se utiliza para napar (cuando cubrimos un alimento con una salsa o crema) y guisar pescado blanco cocido o hecho a la plancha, para guisar carnes… Y para la repostería, como es el uso que le estoy dando yo 🙂
Mantequilla avellana
Mantequilla sin sal (la cantidad que necesitemos de mantequilla avellana o brown butter)
Preparación
Cortamos la mantequilla en trozos no muy grandes, para que no tarde en derretirse.
La ponemos en un cazo a fuego medio y vamos mezclando hasta que se derrita.
Veremos como empieza a burbujear. Seguimos mezclando, podemos usar unas varillas o una cuchara de madera.
Fíjate en cómo se va oscureciendo ligeramente la mantequilla, en el fondo del cazo… y fíjate en el olorcito tan rico que desprende 🙂
Aparta el cazo del fuego y pon la mantequilla en otro recipiente para que no siga calentándose. Es muy fácil que se queme, por lo que hay que llevar cuidado de no dejarla demasiado tiempo al fuego. Si quedan posos en el fondo del cazo, pasa por un colador fino la mantequilla para eliminarlos.
Ya la tienes preparada 😉
Hay una versión más lenta, en la que una vez derretida la mantequilla, eliminamos la parte que queda arriba con una cuchara (éste es el suero de la mantequilla) y seguimos calentando. Una vez vemos que la mantequilla se ha oscurecido (no hasta el punto de que se queme, ojo), la apartamos del fuego y procedemos como en el caso anterior.